La remodelación completa del espacio y la construcción de una nueva sala polivalente estarán listas en el verano de 2024
Cada año, 18.000 personas disfrutan de las actividades que ofrece el CMV, como paddle surf, kayak y submarinismo. Más de 110.000 escolares han practicado vela desde su puesta en marcha
La náutica popular es uno de los ejes principales del proyecto de transformación del Port Olímpic
La reforma del Centro Municipal de Vela (CMV) está ya en marcha. Este mes de junio se han iniciado los trabajos que permitirán renovar completamente el espacio. Las obras están financiadas por Barcelona de Serveis Municipals (BSM) en el marco del proyecto de transformación del Port Olímpic, mientras que la gestión del equipamiento irá a cargo del Institut Barcelona Esports (IBE).
El objetivo de la reforma es incrementar la oferta de servicios para acercar la náutica a la ciudadanía y aplicar criterios de eficiencia, sostenibilidad y accesibilidad. Por eso, el proyecto se plantea en dos vertientes diferentes. Por una parte, la mejora general de las instalaciones; y por otro, la construcción de una nueva sala polivalente, situada en la parte superior.
La nueva sala polivalente, que estará gestionada por BSM, está concebida como un espacio diáfano, adaptable a las necesidades de las personas usuarias del Port Olímpic, el CMV y el propio Ayuntamiento de Barcelona. Dispondrá de una buena accesibilidad y unas vistas al mar inmejorables, por encima del Dic de Recer, y junto a la salida de embarcaciones de vela por la rampa del patio exterior del centro.
La rehabilitación del CMV también incluye la reparación de las diferentes patologías aparecidas a lo largo de los años como son la carbonatación del hormigón y las filtraciones de agua producidas tanto por los lucernarios como por las juntas de dilatación del propio edificio, así como la reforma integral de los vestuarios, el hangar y el gimnasio.
Las obras tienen un presupuesto aproximado de 4,2 millones de euros y se prevé que estén terminadas en verano de 2024.
30 años acercando la náutica a la ciudad
El CMV nació en 1992. Proyectado como parte del equipamiento deportivo construido por el Ayuntamiento de Barcelona con motivo de los Juegos Olímpicos de Barcelona'92, su objetivo ha sido siempre convertirse en la plataforma deportiva de acceso al mar por la ciudadanía de Barcelona y de cualquier amante de la vela. A partir de 2012, el CMV crece como centro náutico e incorpora nuevas actividades como el paddle surf, el kayak y el submarinismo.
La oferta de servicios va dirigida a todos los públicos, tanto para particulares, empresas y entidades, como para centros educativos. La Escola de Vela está gestionada por la Federación Catalana de Vela.
Actualmente, casi 18.000 personas utilizan el CMV cada año para practicar diferentes actividades náuticas, que van desde el paddle surf, el kayak o el submarinismo. Un centro deportivo abierto en la ciudad que también apuesta por la iniciación de este tipo de deportes especialmente entre las personas más jóvenes. Por eso, más de 100.000 escolares han practicado vela desde la puesta en marcha de la instalación.
La remodelación del Port Olímpic avanza a pleno rendimiento
Un Port Olímpic comprendido con la ciudad, la náutica, la economía azul y la gastronomía. Las obras del CMV se añaden a la serie de trabajos que actualmente se encuentran en curso en el marco del proyecto de transformación del Port Olímpic, que avanza a pleno rendimiento con horizonte en la celebración de la Copa América de Vela.
Este verano se completará la apertura del nuevo acceso que conectará el Muelle de Mestral con la Avenida del Litoral. También están muy avanzadas las obras de adecuación de los espacios del polo de economía azul, mientras que el Muelle de Gregal apenas se prepara para hacer frente a su reconfiguración para acoger el Balcón Gastronómico.
En paralelo, avanza la reurbanización del Dic de Recer, que se convertirá en un privilegiado paseo – mirador abierto a toda la ciudadanía.
