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En el marco del proyecto TuroCat de recuperación del turón en Cataluña, en el que participa la Fundación Barcelona Zoo, se ha emprendido una prueba piloto de cría en cautividad y reintroducción de la especie
El objetivo del proyecto piloto es evaluar la adaptación de los turones nacidos en cautividad en las pocas zonas donde subsiste y su futura reintroducción en otros lugares donde casi había desaparecido
En el marco del proyecto TuroCat de recuperación del turón europeo en Cataluña, en el que colaboran el Departamento de Acción Climática, Alimentación y Agenda Rural, la Fundación Barcelona Zoo y la Fundación Trenca, se ha emprendido una prueba piloto de reintroducción de esta especie en la demarcación de Lérida con individuos procedentes del programa de cría en cautividad que ha puesto en marcha el proyecto, con la colaboración del Centro de Fauna del Pont de Suert del DACC. También ha tenido el apoyo de un núcleo zoológico privado en el Pallars Sobirà. Este es la primera vez que se liberan en el medio natural turones (Mustela putorius) previamente criados en cautividad.
En concreto, la iniciativa se desarrolla en colaboración con Raimat Natura, donde hoy se han liberado siete turones. Se trata de un espacio natural de 700 hectáreas donde conviven en plena armonía centenares de aves acuáticas, rapaces en peligro de extinción, mamíferos y los cultivos de viña ecológica de la bodega Raimat. Desde mayo del 2021, es un espacio abierto al público de forma gratuita para que todo el mundo pueda descubrir su rica biodiversidad.
El turón es un consumado depredador de conejos, un problema muy grave para la agricultura, precisamente en la zona de Lérida. La prueba piloto también evaluará el grado de aclimatación de ejemplares nacidos en cautividad a la hora de probar su interacción con el conejo, especie que prácticamente consume en exclusiva en estas zonas. Pero también caza anfibios, ratas y otros roedores.
Además, se han liberado seis ejemplares más en el Alt Empordà, donde se encuentran las poblaciones más importantes de esta especie en peligro de extinción. Los ejemplares liberados llevan un emisor para hacerles seguimiento y estudiar su adaptación al medio.
Esta prueba piloto se inscribe en el marco de una iniciativa más amplia para disponer de un stock reproductor y criar esta especie en peligro de extinción en cautividad para luego liberarlas en el medio. Asimismo, también se está trabajando para obtener ejemplares salvajes y translocarlos en las zonas de Cataluña donde hay que recuperar este animal.
Este proyecto pionero de cría y reintroducción tendrá continuidad en los próximos años para reforzar las poblaciones de turones en otras áreas marcadas por los científicos del proyecto TuroCat, fruto del seguimiento continuado que se hace para evaluar la evolución de la especie. Volver a conectar las poblaciones de turones y evitar el aislamiento genético es vital para el futuro de la especie en Cataluña. También se potenciará la colaboración con empresas y entidades del sector primario y con propietarios de terrenos de elevado valor ecológico para este animal.
Una especie en peligro de extinción
El Catálogo de fauna amenazada de Cataluña, aprobado este último mes de octubre por el Gobierno de Cataluña, clasifica el turón europeo como especie en peligro de extinción. De hecho, es uno de los mamíferos más amenazados de nuestra fauna. Durante los últimos 30 años, sus efectivos y el área de distribución se han reducido drásticamente hasta llegar a la situación actual, en la que la especie habita únicamente en algunos puntos de las llanuras del Alt y Baix Empordà y, de manera testimonial, en las cabeceras del río Ter, en el Ripollès.
El proyecto TuroCat nació en el 2018, gracias al apoyo de la Generalitat y de una beca de la Fundación Barcelona Zoo.