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La red de electromovilidad de Barcelona de Servicios Municipales (BSM), Endolla Barcelona, está testando un sistema para planificar la recarga de vehículos eléctricos en los aparcamientos de BSM y aprovechar las horas de menor demanda energética
Esta medida de gestión inteligente de la energía se enmarca en la voluntad de Endolla Barcelona de contribuir a una transición energética más sostenible y eficiente
Endolla Barcelona cuenta con más de 650 puntos de recarga distribuidos por toda la ciudad y a inicios del 2023 tendrá una cincuentena más
La red de electromovilidad de Barcelona de Servicios Municipales (BSM), Endolla Barcelona, impulsa una prueba piloto para programar la recarga de vehículos eléctricos en la red de aparcamientos de BSM y aprovechar las horas de menor demanda energética. Esta iniciativa se enmarca en la doble voluntad de Endolla Barcelona de acompañar el desarrollo de la electromovilidad de forma sostenible y de fomentar proyectos de innovación que pongan la mirada en retos como la gestión eficiente e inteligente de la energía.
La prueba piloto se llevará a cabo próximamente en el aparcamiento Porta de Sarrià de BSM, ubicado en el distrito de Sarrià-Sant Gervasi. Cuando la persona usuaria de un vehículo eléctrico aparque delante de uno de los puntos de recarga de Endolla Barcelona, tendrá que acceder a la aplicación de servicios de movilidad personal de Barcelona SMOU y escanear el código QR del punto de recarga. Hecho esto, podrá escoger si quiere recargar su vehículo al instante o bien programar la recarga. En caso de escoger la segunda opción, tendrá que indicar qué día y a qué hora tiene previsto coger de nuevo el vehículo y el nivel de recarga que desea. De esta manera, el vehículo se recargará aprovechando las horas valle, es decir, las de menor demanda energética.
Además de contribuir a un uso más eficiente de la energía, la recarga de vehículos en horas valle supondrá un ahorro económico para las personas usuarias de Endolla Barcelona. Actualmente, las políticas tarifarias del servicio ya incentivan su uso en los momentos de menor consumo energético.
Esta prueba piloto forma parte del programa eCharge4Drivers, un proyecto europeo cofinanciado por la Unión Europea en el marco del programa de investigación e innovación Horizonte 2020 y en el que Barcelona participa a través de la red Endolla Barcelona. El objetivo de este proyecto europeo es mejorar la experiencia de los usuarios y las usuarias de vehículos eléctricos reduciendo los tiempos de recarga, desplegando la infraestructura necesaria de modo sostenible y desarrollando puntos de recarga inteligentes y fáciles de utilizar.
Según la concejala de Movilidad, Laia Bonet, “este proyecto es una muestra más del liderazgo que Barcelona está ejerciendo en el ámbito de la movilidad eléctrica con Endolla Barcelona; aparte de crear una amplia infraestructura en toda la ciudad, trabajamos en red con otras instituciones y con el sector en los retos que hay que afrontar para garantizar una transición eficiente e inteligente hacia la electromovilidad”.
Barcelona, líder en electromovilidad en el sur de Europa con Endolla
Con más de 650 puntos de recarga distribuidos con una alta capilaridad por toda la ciudad, Endolla Barcelona es la mayor red pública de electromovilidad del Estado español. Esta red sigue creciendo y a inicios del 2023 habrá puesto en marcha una cincuentena de nuevos puntos de recarga con una inversión de 600.000 euros.
Actualmente, la red dispone de 6,5 puntos por quilómetro cuadrado distribuidos por todos los barrios, con un punto de recarga por cada 11,4 vehículos eléctricos existentes y una disponibilidad del servicio del 97 %. Estas cifras, sumadas al resto de puntos de uso público, convierten a Barcelona en la segunda ciudad europea con mayor número de puntos de recarga por quilómetro cuadrado, por detrás de Estocolmo, y la cuarta en número de puntos por habitante, precedida por Estocolmo, Gotemburgo y Oslo.
Con la voluntad de contribuir a una transición energética sostenible y eficiente, el 75 % de los puntos de recarga de Endolla Barcelona son de recarga lenta y se encuentran en los aparcamientos de BSM, lo que permite liberar el espacio público y promover las recargas planificadas en horas valle off-street, ofreciendo una red eficiente a aquellas personas que no disponen de puntos de recarga en sus domicilios o puestos de trabajo. El 25 % restante de los puntos en la calle son de recarga rápida para promover usos esporádicos, no planificados y de baja ocupación del espacio público.
Este es un proyecto financiado con fondos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, financiado por la Unión Europea - NextGenerationEU.
